A nivel mundial, el tabaquismo representa uno de los desafíos más grandes de salud pública, pues causa más de 8 millones de fallecimientos cada año, de los cuales 1,2 millones corresponden a personas que nunca fumaron pero que estaban expuestas al humo del tabaco.

Ante este panorama, en 2008, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó el plan MPOWER, un paquete de seis medidas para proteger a las personas del consumo de tabaco y sus consecuencias: vigilar el consumo de tabaco y las medidas de prevención; proteger a la población del humo de tabaco; ofrecer ayuda para el abandono del tabaco; advertir de los peligros del tabaco; hacer cumplir las prohibiciones sobre publicidad, promoción y patrocinio; y aumentar los impuestos al tabaco.

Con estas medidas también se buscó promover la acción de los gobiernos para salvar vidas y reducir costos económicos al evitar gastos en la atención de enfermedades relacionadas con el tabaquismo. ¿Dónde estamos ahora? ¿Hemos progresado en la lucha contra el tabaco?

Para tener un panorama actualizado, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) recién publicó el Informe sobre el Control del Tabaco para la Región de las Américas 2022, donde se comparten los perfiles por país de los 35 miembros de la OPS (México entre ellos) y muestra el progreso logrado a partir de la implementación del paquete técnico de medidas MPOWER durante el periodo 2018-2021.

Algunos de los principales hallazgos muestran que:

  • Unos 900 millones de personas, o el 96% de la población de los 35 países de las Américas, están actualmente protegidas por al menos una de las seis medidas de control del tabaco del paquete MPOWER.
  • La aplicación de las seis medidas de MPOWER ha ayudado a reducir la prevalencia del consumo de tabaco del 28% en el 2000, al 16,3% en 2020.
  • Aunque 26 de los 35 países de la Región han alcanzado el nivel más alto de aplicación de la menos una medida del MPOWER, otras como el aumento de impuestos al tabaco han avanzado lentamente.
  • Nueve países no han tomado ninguna medida. 
  • 24 países ya tienen estrategias para proteger a su población de la exposición al humo de segunda mano.
  • 22 requieren de advertencias gráficas en los paquetes de tabaco, sobre los peligros de fumar.
  • 6 países ofrecen un sistema integral para ayudar a las personas a dejar de fumar.
  • 9 establecieron prohibiciones totales de publicidad, promoción y patrocinio del tabaco.
  • 3 países aplican impuestos directos a los cigarros, que representan el 75% o más del precio de venta al público.

El informe también dedica un apartado especial sobre los productos nuevos y emergentes de nicotina y tabaco, como los cigarrillos electrónicos, que actualmente son más accesibles y permiten abrir la ventana a que el consumo de tabaco vuelva a ser socialmente aceptado.

En este sentido, son siete los países que prohíben la venta de sistemas electrónicos de suministros de nicotina, mientras que otros 13 han tomado medidas parciales para prohibir su uso, limitar su promoción y patrocinio, y exigir las advertencias en sus empaques.

El consumo de tabaco es el principal factor de riesgo para el desarrollo de cáncer de pulmón y otras enfermedades graves, pero es totalmente prevenible. En las manos de las instituciones, gobiernos, personal de salud, sistemas de salud y sociedad civil, está el reducir y evitar su consumo.

Les invitamos a leer el informe completo aquí.

Con información de la Organización Panamericana de la Salud, Nuevo informe de la OPS sobre el progreso en la lucha contra el tabaquismo en las Américas, 2022.